El avance imparable del mundo de la informática y de la tecnología ha servido para que en dos décadas hayamos avanzado más que nunca. Nada tiene que ver un PC de ahora con uno de inicios de la década anterior, y ya no hablemos con uno del año 2000 (las diferencias con este último dan hasta miedo). Esto provoca que mucho software que utilizábamos por aquel entonces ya no sea compatible con los equipos actuales. En Softonic traemos una guía con aquellos programas retro que puedes instalar en Windows 10, así como una manera de ejecutarlos sin recurrir a versiones anteriores.
Guía de “instalación”
Arrancamos con lo más básico, con eso que es imprescindible que sepas: cómo ejecutar cada uno de estos programas retro en tu PC con Windows 10. Para llevar a cabo esta tarea hay varios métodos, así que vamos a empezar por los más básicos hasta los más complejos.
Modo compatibilidad
El primero de ellos, en cuanto a dificultad se refiere, no es otro que la configuración de compatibilidad. Cuando Windows 10 salió al mercado, el sistema operativo lo hizo con una gran semejanza a Windows 7 y Windows 8. Microsoft sabía que no podía fragmentar mucho la base de usuarios, así que su último sistema operativo es compatible con casi todo el software de ediciones anteriores, pero es que, además, incluye una opción para comprobar si determinados programas se pueden ejecutar en versiones más antiguas todavía.
Esta función de la que hablamos recibe el nombre de “modo de compatibilidad” y es la que te vamos a explicar en primera instancia. Basta con hacer clic derecho encima del icono del programa y pulsar sobre “Propiedades”. Una vez dentro, localiza la pestaña Compatibilidad (que no deja dudas).
Si todo va bien, verás una casilla llamada “Modo de compatibilidad” con una opción clara: “Ejecutar este programa en modo de compatibilidad para”. Actívala y busca el sistema operativo Windows donde sabes que ese programa funciona sin problemas (desde Windows 95 a Windows 7 pasando por Windows Vista y demás). Cuando termines, dale a “Aplicar” y luego “Aceptar”.
Modo administrador
Este pequeño truco seguro que te suena, ya que has tenido que realizarlo en alguna ocasión. Cuando nos encontramos con problemas a la hora de iniciar un software, muchos especialistas recomiendan que “abras el ejecutable administrador”. Es algo básico en todo manual del informático, tan simple como que algunos programas necesitan de este requisito para funcionar de manera correcta.
Por tanto, cuando tengas algún software que no funciona bien en Windows 10, cliquea en el botón derecho del ratón y luego pulsa en “Ejecutar como administrador” (siempre viene con el símbolo de un escudo). Cuando lo hagas, te pedirá permisos de nuevo, así que concédeselo y listo.
Una máquina virtual
La última vía para poder ejecutar software antiguo en Windows 10 es a través de una máquina virtual. Tras este nombre se esconde una de esas utilidades informáticas que son una maravilla si tenemos problemas de compatibilidad: emular cualquier versión de Windows antigua dentro de uno actual.
Como curiosidad, Windows 7 sí incorporaba esta máquina virtual a través de un “Modo Windows XP”, pero Microsoft decidió eliminarlo en Windows 10 (y desconocemos el porqué, ya que era muy útil). Por tanto, no te va a quedar más remedio que recurrir a crear una máquina virtual en tu PC a través de esta guía dedicada.
Guía de programas retro
Tras esta explicación sobre cómo puedes ejecutar programas antiguos en tu sistema operativo Windows 10, toca el momento de traer ese software que marcó una época durante la década de los ochenta, noventa y comienzos de siglo.
Prince of Persia
Arrancamos con un auténtico juegazo: Prince of Persia. Desarrollado por Jordan Mechner junto a la labor increíble de su hermano (le sirvió de referencia para los saltos), este juego marcó un punto de inflexión dentro del género de las plataformas y aventuras en los videojuegos, hasta tal punto que muchos de los diseñadores actuales lo consideran un pilar esencial del mismo. Es divertido, fácil de jugar (si no eres muy torpe con los saltos) y todavía sigue suponiendo un bonito desafío casi 30 años después de salir al mercado.
Wolfenstein 3D
Si Prince of Persia supuso una piedra angular dentro del género de plataformas, Wolfenstein 3D hizo lo propio con un género tan importante como el de la primera persona. Carmack y Romero desarrollaron una aventura donde el agente aliado Blazkowicz debía escapar de una prisión nazi llamada Castillo Wolfenstein. La clave no estaba en su historia, sino en cómo cambió por completo la manera de concebir los juegos en primera persona con entornos tridimensionales, donde el jugador se podía mover libremente sin encontrar obstáculos.
Encarta 95
Para los más jóvenes del lugar, la palabra “Encarta” es probable que ni les suene, pero para los que somos más viejos… trae buenos recuerdos. Ahora basta con buscar en Google aquello que queremos y tenemos a nuestra disposición miles y miles de páginas web con información, pero esto antes no era así y teníamos que recurrir a Encarta. Este programa era una enciclopedia virtual en formato CD que poseía miles y miles de entrada de datos. Venía con imágenes, vídeos, infografías y mucho más, algo no habitual para la época y con la que alucinábamos todos.
Music Match Jubebox
No hace muchos días traíamos por aquí un completo artículo con los mejores reproductores multimedia del mercado, capaces de reproducir subtítulos, emisiones en streaming, aumentar o disminuir la velocidad y mucho más. Todo esto que ahora es tan normal, hace dos décadas era casi impensable y teníamos que conformarnos con pocas funciones, y muchas de ellas las incorporaba Music Match Jubebox. Este programa musical controlaba las librerías de audio, CD, radios de Internet (de esos tiempos) y un largo etcétera. El programa se estrenó en diciembre del 98 y cesó casi seis años después, el 14 de septiembre de 2004. Dale a la gramola.
MSN Messenger
Aquí vamos a tocar la patata emocional, vamos a los sentimientos más profundos. Antes de Telegram, antes de WhatsApp, antes de todos los programas de mensajería habidos y por haber, el líder indiscutible tenía nombre propio: MSN Messenger. El zumbido, los emoticonos, los estados… Todo esto forma parte de la iconografía de varias generaciones que crecieron con este software al que uno se conectaba para hablar con otras personas en línea. Había que estar delante del PC y nada de poder llevarlo encima en un teléfono móvil (los smartphones ni existían). Si todavía conservas una cuenta de Hotmail, Outlook, MSN, etc., puedes tener acceso a tu perfil, aunque obviamente sin funcionalidades directas.
Greenshot
Lo de hacer una captura de pantalla siempre ha sido muy sencillo, pero no ha sido tan fácil lo de capturar una parte concreta de la misma. Con anterioridad, lo normal era coger la captura en cuestión y recortar el área seleccionada. Poco a poco fueron surgiendo programas muy competentes que hacían esta función, y uno de ellos era Greenshot. La finalidad de este software no es más que la de crear rápidas capturas de pantalla de zonas determinadas, de una pantalla o de esta al completo. Funcionó muy bien hasta que Windows introdujo la herramienta de “Recortar” como predefinida, momento en el que pasó a mejor vida.
Nero
Todos hemos grabado un CD o DVD en alguna ocasión. Estos han formado parte de nuestra vida, sobre todo en la era donde los pendrives apenas existían, los discos duros no eran tan grandes y necesitábamos estos soportes para guardar datos que no fueran de nuestras versiones anteriores de Windows. El programa estrella para guardar los mismos era uno: Nero. Estuvo en funcionamiento durante casi una década, tiempo más que suficiente para acumular millones de descargas en todo el mundo gracias al apoyo imparable del equipo de desarrolladores. Y también tuvimos que tirar muchos discos a la basura por que el proceso de grabación había fallado, todo sea dicho…
Picasa
Cuando Google todavía no era un gigante al que temer, la compañía lanzó al mercado un programa de gestión de fotografías que seguro que muchos recuerdan: Picasa. Tras este nombre se escondía un software de gestión de fotografía bastante funcional. Estuvo en activo hasta el año 2014, cuando se sustituyó de manera definitiva por lo que ahora es Google Fotos (la idea era aglutinar todas las opciones de Google de fotografía en torno a un único sistema). Por cierto, si todavía tienes fotos en Picasa, estas deberían aparecerte dentro de Google Fotos (con etiquetas, títulos y comentarios incluidos).
Google Earth
Era el programa más básico del mundo, tan simple como que permitía visionar cualquier parte de la Tierra desde el espacio haciendo zoom donde quisiéramos. ¿Te suena? Por supuesto, ya que hablamos de Google Earth, lo que posteriormente terminó creando Google Maps con un mayor grado de detalle y concisión. Aunque Google Earth todavía sigue en activo a través de su modalidad online, el programa offline desapareció hace casi una década. Se puede seguir descargando, por si quieres ver cómo era tu ciudad hace 10 años con la última actualización.
Quick Time Player
Cerramos este artículo con un reproductor multimedia que seguro que también suena: Quick Time Player. Propiedad de Apple, se convirtió en el estándar de casi todos aquellos que tenían algún terminal de la manzanita, ya que obligaba prácticamente a su instalación para poder gestionar el contenido audiovisual. Fue perdiendo importancia conforme pasaron los años, hasta tal punto que la propia compañía ni recomienda instalarlo ya (para usarse de manera asidua, claro).
